Nuestros Principios


Teniendo en cuenta los fines de la educación (Ley General de Educación y Decreto 1860 de 1994 Artículo 5), hemos definido los siguientes principios institucionales:

  • El fortalecimiento de la autoestima:
    Es uno de los aspectos más importantes máxime, si se tiene en cuenta que es en la edad preescolar cuando se forman la confianza en sí mismo y las bases de la personalidad, lo cual permite promover la iniciativa, la seguridad y la creatividad.
     
  • La construcción de autonomía:
    Se evidencia como forma básica de desarrollo, que permite al niño tomar decisiones con sentido crítico, a partir del intercambio de puntos de vista, para construir así sus propios valores respetando los valores de los demás, buscando soluciones a los problemas mediatos e inmediatos y estableciendo normas colectivas.
     
  • El espíritu investigativo:
    Promueve la búsqueda de los por qué y los cómo de las cosas, orienta al niño en la descripción, la comparación, la comprensión, el diálogo, la puesta en común para la construcción de conocimiento.
     
  • La búsqueda de identidad cultural:
    Este principio busca rescatar los valores culturales propios que se traducen en el aprecio y en el respeto por las costumbres, tradiciones y creencias del grupo social donde se desenvuelven los niños.
     
  • El fortalecimiento del concepto de persona:
    Se concibe al niño como un ser dinámico, con iniciativa, creativo, crítico, reflexivo y social, capaz de asumir su rol protagónico dentro de la comunidad.
     
  • La institución como generadora de procesos y transformaciones:
    Pretende incidir, en todos los aspectos de la vida de los miembros de la comunidad (sociales, políticos, económicos, científicos y tecnológicos) con el fin de mejorar la calidad de vida.
     
  • El rescate de valores:
    Se asumen como elementos primordiales para la convivencia humana.
     
  • La participación democrática:
    Se fundamenta en el trabajo colectivo a través de la vinculación de los padres y de otros agentes educativos de la comunidad, asumiendo responsabilidades en la formación de los niños.
     
  • El equilibrio del niño con la sociedad y la naturaleza:
    Se concibe al niño como un ser social dentro de un contexto y por ello se busca que establezca relaciones armónicas consigo mismo y con el entorno.